Pétalos de colores alfombran la dehesa; narcisos, lirios, cantueso, jaras, madroño, romero, …dan aroma y vida a estas tierras de singular belleza y valor ecológico.
Dentro de la comunidad florística de Tentudía cabe destacar, además de las interesantes y variadas especies de orquídeas, a una planta endémica de su sierra. Se trata de la Centáurea tentudaica, perteneciente a la familia de las compuestas, de pequeño porte y flor rosada, incluida en el Catálogo Regional de Especies Amenazadas de Extremadura.
Junto al dominio arbóreo del encinar, aparece el alcornocal, el quejigal y el robledal, acompañados de manchas de castaños en áreas serranas. Bajo esta importante masa forestal asoma un tupido sotobosque, compuesto por arbustos y matorrales aromáticos; madroños, durillos, majuelos, lentiscos, retamas y escobas, brezo, tomillo, cantueso y cistáceas como la jara, el jaguarzo o la estepa blanca, entre otros, sirven de despensa y dan cobijo a una interesante y rica fauna.